En los próximos días deberá comparecer ante el ministerio Público el juez de policía local de Sagrada Familia, Mario Flores Lillo, por ser sorprendido manejando en estado de ebriedad. La autoridad fue fiscalizada el fin de semana pasado en el sector de la Plaza San Francisco de Curicó, en un control rutinario de Senda y carabineros tendiente a evitar accidentes de tránsito por consumo de alcohol.
Una vez que su automóvil se detuvo, Mario Flores se identificó como juez de policía local, pero procedió a hacerse el alcotest sin ningún problema, verificándose que había 1.84 grados de alcohol por litro de sangre. por lo que su licencia quedó retenida hasta que entregue su versión de los hechos.
Hálito alcohólico
Personal policial informó que al momento del control, Flores Lillo presentó hálito alcohólico y problemas para hablar, lo que evidenció que su estado no era el apto para estar tras un volante. Tomando en cuenta que no provocó ningún accidente con lesionados ni daños a la propiedad, el juez quedó el libertad tras comprobarse su domicilio y ser citado a la fiscalía. Por lo anterior, solo deberá pagar una multa, es decir, la sacará bastante barata, pero le servirá de lección.