Un nuevo error voluntario o involuntario se cometió en el hospital de Curicó y su resultado fue la muerte de una guagua de solo un año de vida. Lo único claro hasta ahora es que ¿alguién? inoculó en vez de suero cerca de 5 centímetros cúbicos de leche al menor, lo que lo provocó su muerte.
Un hecho por lo menos curioso es que el centro asistencial entregó el cuerpo a la familia oriunda de Teno para que se realizara su funeral ayer pasadas las 20:00 horas. En medio del velorio, llegó personal de la Brigada de Homicidios de la PDI para llevarse el cadáver y practicar la autopsia de rigor.
Reacción tardía
El hospital reconoció que no hizo lo correcto, pues correspondía informar al ministerio Público del extraño deceso. Recién esta mañana estampó una denuncia, pero con una versión absolutamente sesgada, según lo relatado por el fiscal de turno Andrés Gaete. "Explican que su madre, que se encontraba con él en ese momento, le habría inoculado la leche, lo que le provocó al menor una reacción en donde los esfuerzos del personal médico no fueron los suficientes".
La otra versión
La familia del bebé rechazó la versión del hospital y acusa a que una enfermera fue la que le suministró un suplemento alimenticio al menor que finalmente terminó con su vida. Por eso, las diligencias ordenadas por la fiscalía serán claves para determinar qué pasó realmente. Paralelamente, el hospital ordenó un sumario administrativo, pues aunque haya sido la madre la culpable, hay responsabilidad del centro asistencial, pues debió haber evitado esa situación.