Tras una intensa búsqueda por parte de un equipo de detectives de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme) de la PDI de Curicó, se logró dar con el paradero de un prófugo por el delito de violación de una menor de 9 años. La violación y abusos sexuales reiterados se habrían generado el 2005, luego de que el detenido, padrastro de la víctima, aprovechada los momentos en que la madre le dejaba al cuidado de su hija para violarla de manera reiterada por un período de 2 años.
Oportuna denuncia
Oportuna denuncia
Luego de la denuncia efectuada por una asistente social del hogar San Ramón Nonato de Curicó, el año 2007, la fiscalía emitió una orden de investigar a la Brisexme, cuyo personal especializado indagó y efectuó las diligencias para establecer los hechos denunciados. Sin embargo, una vez que el juzgado de Garantía de Curicó emitiera una orden de detención en su contra para cumplir una condena de 5 años y 1 día, el imputado se refugió en diversas zonas rurales del país para no ser ubicado.
Trabajos esporádicos
De acuerdo a los antecedentes policiales, el imputado había efectuado trabajos esporádicos como obrero agrícola, sin contrato, logrando evadir el accionar policial durante 7 años. Finalmente, Héctor Farías Hernández, de 49 años, fue capturado en la localidad rural de Curacaví, V Región siendo puesto a disposición del Juzgado de Garantía de Melipilla, para su respectivo control de detención y posterior cumplimiento de condena.
"Dedicación y tiempo"
El jefe de la Brisexme Curicó, subprefecto Salgari Melo Tanner, comentó que “encontrar y detener condenados es una tarea muy difícil que requiere de dedicación y tiempo por parte de los detectives, por cuanto estas personas prófugas de la justicia realizan todo cuanto pueden para evitar ser detenidos, pese a lo anterior de manera permanente nos encontramos actualizando los archivos de condenados por delitos sexuales en especial a menores de edad”.