Durante la mañana de ayer hubo una reunión
entre los involucrados en el asunto, donde se analizó lo resuelto por el ente
fiscalizador que determinó que debe hacerse una ordenanza y no un reglamento
para controlar el comercio ilegal y otros delitos asociados. La gobernadora provincial,
Macarena Pons, dijo que se le preguntó
al alcalde que va a hacer. “Por sus comentarios no van a hacer nada, mientras
la Contraloría no responda lo que él solicitó el viernes con un oficio”, contó.
Sin embargo, dijo que igual se fiscalizará la “Feria de Las
Pulgas”. “Lo que ataña a la cancha y las calles aledañas si vamos a realizar
fiscalizaciones. Ya lo dispuso con la Prefectura de Carabineros, donde se
fiscalizará la calle Licantén, que fue lo que los dirigentes nos solicitaron”,
apuntó. En tanto, el prefecto de Carabineros, coronel Aldo Borroni, puntualizó
que se controlará a las personas que están infringiendo la ley y no a las
personas que se ganan honradamente la vida en ese lugar.
Posición alcalde
Después de varios días de
silencio, el alcalde de Curicó, Javier Muñoz, se refirió a este
asunto. Dijo que él siempre ha estado atento a lo que pasa en la “Feria de Las Pulgas”.
“Este alcalde ha estado particularmente impulsando las acciones que dicen relación
con controlar el comercio ilegal en la vía pública en todo Curicó”, acotó. A juicio de Muñoz, los
delitos se deben enfrentar con voluntad, independiente del instrumento que se
tenga a mano, por lo cual llamó a no sacar dividendos políticos del tema. “Para
que Carabineros de Chile con apoyo de la Municipalidad, Servicio de Impuestos
Internos, del Servicio de Salud desarrolle labores de fiscalización no requiere
de ningún instrumento más que la ley. Lamentablemente, aquí se ha cruzado la
cosa política que entraba los procesos de limpieza de las calles,
particularmente cuando se ejerce el comercio ilegal”, contó.