El protagonista de esta extraña e insólita historia es
César Guajardo Salinas, apodado como “El Yayo”, quien era intensamente buscado
por las policías y personal de Gendarmería luego que se fugara anoche de la cárcel de Curicó. El preso se encontraba haciendo
el aseo a la entrada del penal, momento que aprovechó para acceder al techo del
inmueble a través de una escalera de emergencia. Posteriormente, se las ingenió
para saltar el cierre perimetral.
Entrega
Pero poco duró la escapada de este hombre, pues esta mañana se entregó en el mismo recinto carcelario. Pasadas las 10:00 horas
llegó muy tranquilo al recinto y les comentó a los gendarmes que estaban en la
guardia que se venía a entregar. El personal de Gendarmería reaccionó con
sorpresa y le preguntó quién era. El hombre les dijo con mucha tranquilidad que
era la persona que se había fugado del penal. El abrieron la puerta y quedó
nuevamente recluido.