La audiencia se llevó a cabo en el Tribunal de Garantía de esta ciudad, donde estaban presente la viuda y dos de los tres hijos de Marcelo Andrés Madariaga Moreno, quien murió, a los 42 años, el 27 de febrero de 2019.
Ese día llegó con un fuerte dolor en
el pecho y presentó vómitos, por lo que se le practicaron varios exámenes que,
según el Hospital de Curicó, “salieron bien”, por lo que lo derivaron a su
casa, donde a las horas falleció.
Por tal motivo, su familia recurrió
a la justicia y logró que el médico responsable (un ciudadano ecuatoriano)
fuera formalizado por cuasidelito de homicidio. Sin embargo, como el imputado
no arriesgaba pena de cárcel efectiva, se optó con una reparación económica.
Tomando en cuenta el “pacto de
silencio”, no puede dar a conocer la
cifra y la viuda, Gilda de la Fuente, se excusó de dar declaraciones.
Cerrar ciclo
El que sí habló fue el fiscal jefe de Curicó, Miguel Gajardo, quien sostuvo que se puso térmico a la causa tras largas negociaciones entre las partes.
“Tal vez no es 100 por ciento lo que
se espera en estos casos, pero por lo menos es una forma de cerrar este ciclo y
poder seguir adelante también con la vida de las personas”, indicó.
El profesional del Ministerio Público
recordó que los cuasidelitos tienen una penalidad bastante baja. “Porque se
trata de hechos donde no hay un dolo, sino que hay una culpa, una negligencia
y, por lo tanto, nuestra legislación lo sanciona de una forma más benigna”,
dijo.
Miguel Gajardo precisó que un
acuerdo económico es una forma que “medianamente repara a las víctimas y al
mismo tiempo da una tranquilidad a la familia porque ir a un juicio oral hay
una eventualidad de perder o ganar”.