Se trata de “Ulises”, quien recibió su último adiós en emocionante ceremonia realizada en dependencias de la Primera Comisaría de Curicó. El can estuvo acompañado por el sargento segundo, Héctor Castro Veliz, su compañero de labores.
El perro policial partió después de
realizar por más de 8 años servicios preventivos en el sector céntrico de
Curicó y fue diagnosticado por el médico veterinario institucional con un osteosarcoma
en la articulación humero-radio-ulnar costado derecho. Además, presentó una
metástasis a nivel del esternón y en el campo pulmonar, por lo que hoy sus
restos descansan en dependencias de la unidad policial.
La jornada, que se realizó en el patio exterior
de la Primera Comisaria Curicó, estuvo llena de emotivos momentos cuando su
guía debió sepultar a su can y compañero de servicio policiales.
Jornada triste
El prefecto subrogante, teniente coronel
Mauricio Bascuñán Letelier, señaló que fue una triste despedida “Ulises fue
reconocido por la comunidad por positivos procedimientos policiales, él y su guía
mantenían una gran conexión que se reflejaba en cada uno de los servicios,
formaciones, presentaciones educativas en los distintos establecimientos
educacionales, entre muchas otras oportunidades.
Una placa recordatoria será instalada donde
descansan los restos del can Ulises, la que contará con una reseña de su
trayectoria en la unidad policial.