Cerca de 10 integrantes activos tiene esa entidad sin fines de lucro y amante de los animales, la cual se la juega por la tenencia responsable.
La presidenta de la agrupación, denominada “Pro Derecho de las Mascotas”, Gabriela
Andrade, contó que tienen una importante relación con la comunidad, donde uno
de sus principales objetivos es que cada perro y gato tengan un dueño que se
haga cargo.
“Hacemos educaciones en colegios e instituciones que nos solicitan y
también trabajamos en las esterilizaciones felinas y caninas de machos y
hembras”, apuntó.
Agregó que también tienen evaluaciones que se gestionan a través de la
Municipalidad de Curicó. “Consiste en un médico veterinario que viene una vez a
la semana a Sarmiento y hace el tema de desparasitación, la instalación de
microchip y se ve la evaluación ambulatoria”, dijo.
Sobre ese servicio, Gabriela Andrade afirmó que comenzaron con pocas
atenciones, pero que “desde la pandemia para adelante, tenemos a la semana
cerca de 50 mascotas y al año más menos son alrededor de dos mil”.
Puntualizó que en la agrupación se ayuda voluntariamente. “Somos todos acá
de la localidad y tengo algunos socios que se han trasladado por trabajo a
vivir a otros lugares y por eso hoy día no están tan activos”, resaltó.
Vínculo
La presidenta de la organización “Pro Derecho de las Mascotas” aseguró que tienen
muy buena relación con las juntas de vecinos.
“Le damos la posibilidad de que cada vez que necesiten los cupos ellos nos
avisan y dejamos espacio para cada uno de ellos o también se va gestionando que
el veterinario pueda ir a operar al sector”, manifestó.
La agrupación tiene su base de operaciones al lado del Cuerpo de Bomberos
de Sarmiento, en la intersección de Arturo Prat y 18 de Septiembre, donde la
gente puede ir a inscribirse.
“Son dos conteiner que están totalmente habilitados para trabajar en ellos
en el tema clínico y peluquería, que es un poquito lo que nos ha costado
empujar por el hecho de que los voluntarios no se manejan cien por ciento en el
tema, por eso es más lento”, indicó.
Gabriela Andrade precisó que ellos funcionan “gracias a los aportes que la
comunidad va dejando cuando puede y con eso solventamos gastos de luz y agua.
Por ahí, nos han regalado un saquito de comida que también es un aporte que nos
sirve”.