Con incredulidad y malestar, hace algunos días los habitantes del sector Las Acacias vieron unos tachones blancos instalados por Vialidad, con los cuales se pretende bajar la alta tasa de tragedias carreteras en esa zona, muchas que terminaron con consecuencias fatales en los últimos meses.
Uno de los vecinos afectados es Fernando Reyes, quien perdió la cuenta de cuántos vehículos quedaron incrustados en la reja de su vivienda por conducción a exceso de velocidad, bajo los efectos del alcohol o no estando atento a las condiciones del tránsito.
Al ver la medida para evitar los accidentes, dijo que no lo podía creer. “Es una vergüenza cómo invierten las platas sin dar con ningún resultado porque esos tachones son para la risa”, cuestionó. Agregó que es un trabajo que no sirve de nada, pues casi no se ven.
“Nadie respetan esas cuestiones, son de mala calidad y quizás cuánto van a durar, pues se empiezan a salir, igual que los que habían puesto frente a mi casa”, dijo.
El vecino espera que las autoridades pronto tomen medidas definitivas, tal como se hizo en el sector de Isla de Marchant, donde también se registraban muchos accidentes fatales.
“No es lo que se esperaba”
Sobre el tema también se refirió el presidente de la agrupación “Unidos por Sarmiento”, Carlos Ortúzar, quien reconoció que están a la espera de trabajos más concretos en la denominada Curva de la Muerte.
“Si bien es cierto no es una solución definitiva al problema, en algo puede ayudar, pero no es lo que se esperaba por la comunidad del sector”, precisó.
El dirigente admitió que los tachones “no son muy visibles y no cumplen la función que deberían tener ese tipo de intervenciones”.
Ante ese escenario, Carlos Ortúzar afirmó que lo ideal es que a futuro haya más medidas preventivas antes de que suceda otra tragedia en el camino entre Curicó y Sarmiento.
“Lo mejor sería un resalto o lomo de toro porque eso obliga a los vehículos a disminuir la velocidad y eso es lo que se requiere en el sector, por ejemplo, del Colegio San Pablo”, manifestó.
.jfif)